Las cortinas convencionales pueden arrugarse con facilidad. A la hora de lavarlas, puede que encojan. O es posible que con el tiempo y el uso vayan perdiendo esa vitalidad que tenían al principio y tiendan a parecer deslucidas y arregladas.
Uno de los motivos por los que pasa esto es por las telas de las cortinas. Existen sin embargo cortinas que no se arrugan, ya que están hechas en poliéster, y que pueden ser perfectas para tus cortinas. Aunque hay una solución mejor todavía, y es utilizar estores de alta calidad, que los puedes tener de aluminio o fibra de vidrio, lo que permitirá que queden lisos y tengan un aspecto más elegante.
El problema de las cortinas cuando encogen o están arrugadas
No hay nada malo en que la caída de la cortina tenga un poco de arruga en la parte inferior, si es ese el estilo que sigues.
El problema es cuando no está hecho a propósito, sino que las arrugas son poco atractivas y se deben a que se han tomado mal las medidas, a que la tela es antigua, a que no se ha planchado correctamente, o a que la tela de la cortina ha encogido por el lavado o está muy estropeada.
El resultado es un efecto poco atractivo en tu salón, tu cocina o tu dormitorio, ya que a nadie le gusta ver unas cortinas descuidadas.
Piensa que si tienes unos ventanales grandes, las cortinas van a ser sin duda el centro de atención. Si no tienes cortinas, es probable que te vean desde el edificio de enfrente y apenas tengas privacidad, por lo que tampoco es esa la solución.
Lo mejor en tu caso sería sustituir tus cortinas arrugadas y deslucidas por estores que nunca se arrugan y se mantienen lisos como el primer día.
¿Cómo quitar las arrugas de las cortinas?
Si tienes cortinas arrugadas, una posible solución es usar un rociador de agua y dejar que luego se sequen. Lo mismo que si estuvieras planchando la ropa, pero con las cortinas colgadas, así se adaptarán mejor a la forma en la que tienen que caer.
No obstante, si esto no te funciona, es posible que tengas que planchar las cortinas, lo que resulta mucho más complicado si quieres hacerlo bien, especialmente cuando son cortinas grandes.
Una manera de evitar todos estos problemas es sin duda utilizar unos estores enrollables lisos, ya que estos no están diseñados para arrugarse y su caída le aporta estilo y diseño a tu hogar.